El jefe de Gobierno español presentará un "programa común progresista" a los partidos que son susceptibles de apoyar su investidura.
MADRID, España.- El presidente del gobierno español, el socialista Pedro Sánchez, anunció este viernes que a finales de agosto y principios de septiembre volverá a reunirse con Unidas Podemos con “un programa abierto” para acordar su apoyo a la formación de un nuevo Ejecutivo progresista que evite que España se vea abocada a unas nuevas elecciones.
Sánchez explicó que en la próxima semana trabajará para “recopilar y sistematizar” las propuestas aportadas por las diferentes organizaciones de la sociedad civil con las que se reunió en los últimos días, para luego trasladar un “programa común progresista” a los partidos que son susceptibles de apoyar su investidura.
“Será una propuesta abierta a la negociación, especialmente con Unidas Podemos, no vamos con un programa cerrado”, subrayó Sánchez en declaraciones a la prensa antes de reunirse con asociaciones culturales en Madrid.
Tras fracasar en su primer intento de investidura el pasado 25 de julio, el líder socialista prácticamente no mantuvo ningún contacto con los partidos cuyo apoyo necesita si quiere volver a presentarse al Parlamento para solicitar nuevamente un respaldo a su reelección.
Sánchez, que ganó las elecciones del pasado 28 de abril sin mayoría absoluta, no tiene posibilidades de ser reelegido sin el respaldo del partido de izquierda Unidas Podemos, la cuarta fuerza política que lidera Pablo Iglesias, quien sigue exigiendo un gobierno de coalición a cambio de su apoyo.
Pero además necesita el apoyo de otros partidos minoritarios y al menos la abstención de los independentistas catalanes, a los que por primera vez incluyó en las negociaciones tras considerarlos “nacionalistas”.
Hasta ahora Sánchez había pedido la abstención del conservador Partido Popular (PP) y los liberales de Ciudadanos para “no depender de los independentistas”, según decía, ante las críticas de Iglesias, que lo acusó de querer gobernar mirando a la derecha.
Sin embargo, la negativa del PP y Ciudadanos a facilitar su reelección pese a ser el candidato más votado y no haber otra alternativa, Sánchez se ve obligado a negociar con los secesionistas.
“Hablaremos con el Partido Nacionalista Vasco (PNV), con los regionalismo cántabros, con las fuerzas nacionalistas’ de Cataluña y lógicamente hablaremos también con Unidas Podemos para ver si podemos llegar a un acuerdo”, dijo Sánchez.
Los independentistas de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) ya se mostraron muy claramente a favor de facilitar la reelección de Sánchez sin pedir prácticamente nada a cambio, con lo que el escollo sigue siendo Unidas Podemos y su pretensión de gobernar en coalición con el Partido Socialista (PSOE) de Sánchez.
El líder socialista se irá de vacaciones el 15 de agosto y retomará su agenda el 19 con una reunión con el PNV, partido que estuvo siempre dispuesto a apoyar su reelección si llegaba a un acuerdo con Iglesias, algo que no fue posible. Ahora tiene poco más de mes para revertir la situación y evitar que España vuelva a las urnas.